Me había sugerido alguien que hoy no hiciese resumen del partido, y en un
principio así lo había decidido, pero ¿porqué no? Esto es el deporte. Hemos tenido un día
horroroso. No hemos jugado bien, lo sabemos todos: los espectadores, los jugadores
y los entrenadores.
Y dicho esto mi pregunta es ¿qué ha pasado? Porque han sido 40 puntos, y
sinceramente no creo que seamos 40 puntos peores que Sierramar. Pero el
marcador está ahí por algo.
Al descanso perdíamos sólo de 6 ó 7 puntos; ha sido ponernos a 4 puntos y desaparecer del
partido. Con poquito nos han desbordado y nos han dejado muy en evidencia. Por
eso no me preocupa la derrota porque con poquito que corrijamos esos errores
nuestra mejora va a ser apreciable.
De todas formas hemos jugado en una pista de patinaje, con aros maltrechos
y por mucho que me diga todo el mundo esa pista era tan pequeña como jugar
dentro de una caja de zapatos, amén de que jugábamos con un equipo del 97 y
bueno de lo otro no hablo porque no hablo. Al final, después de 39 minutos se
oyó una orden extraña desde un banquillo, no voy a decir cual, y a pesar del marcador nos ha dado un ataque de
risa. Si señor. No por nada sino porque nos ha hecho mucha gracia.
No sé que pasará en el partido de vuelta pero estoy seguro que va a ser muy
diferente. Ganaremos o perderemos, pero seguro que diferente. Porque de los
errores se aprende, y de las derrotas tan contundentes más aún.
Todos sabéis donde está la solución. Trabajando más todavía, con más ahínco,
porque es así. No hay otra. Trabajo y más trabajo.
Haced lo que vuestro entrenador os pide, ni más ni menos.
Para mí sois el mejor equipo de la categoría y seguro os voy a ver jugar como sabéis de aquí hasta el final
de la temporada. Y recordad que lo importante no es ni ganar ni perder sino
como acontecen ambas cosas, eso si es importante.
A trabajar que dentro de dos semanas jugamos con Salesianos 98.
Animo chicos, somos los mejores.
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